Ciudad Juárez, Chihuahua.- En un acto que sacudió el corazón de una ciudad ya acostumbrada al dolor, agentes de la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito por Razones de Género y a la Familia, en coordinación con la Agencia Estatal de Investigación, lograron rescatar a un niño de apenas 9 años… un pequeño que no jugaba, no estudiaba, no reía. Su día a día era pedir limosna… obligado por su propio padre.
El operativo se llevó a cabo en la Plaza Pinocelli, sobre la avenida Miguel de la Madrid, donde los elementos ministeriales encontraron al menor pidiendo dinero. Muy cerca, vigilándolo como un cazador a su presa, se encontraba Juan Antonio G. M., de 41 años. Un hombre que, lejos de proteger a su hijo, lo explotaba en las calles bajo el sol y el polvo de Ciudad Juárez.
El delito: trata de personas, en su modalidad de mendicidad forzada.
El impacto: un niño al que le robaron la infancia.
Tras su detención en flagrancia, el sujeto fue puesto a disposición del Ministerio Público. Mientras tanto, el pequeño fue trasladado a las instalaciones de la FEM, donde recibió atención médica y psicológica para descartar cualquier otro tipo de daño.
Hoy, bajo la tutela del DIF Estatal, este niño tiene una nueva oportunidad. Un respiro. Un espacio para volver a ser lo que siempre debió haber sido: un niño.
La Fiscalía General del Estado reafirmó su compromiso de proteger a niñas, niños y adolescentes, y de perseguir sin descanso a quienes abusan de los más vulnerables.
Porque a veces, los monstruos no se esconden bajo la cama… caminan con nosotros, disfrazados de familia.
Y justo cuando parecía que no había salida… el viento volvió a soplar.