Desde la tarde de ayer, un grupo de ciudadanos desesperados se plantó en pleno corazón de la ciudad para exigir lo que, aseguran, se les ha negado tras las intensas lluvias que azotaron la colonia El Porvenir. ¡Y no se movieron en toda la noche!
El cruce de las calles Aldama e Independencia se convirtió en su trinchera improvisada, dejando completamente paralizadas las principales vialidades del centro. Automovilistas y peatones se vieron atrapados por horas debido a esta sorpresiva protesta.
Los manifestantes claman por apoyo urgente: láminas, electrodomésticos y ayuda real para reconstruir sus viviendas, que aseguran quedaron severamente dañadas por las lluvias. “¡Ya no podemos más!”, gritaron algunos de los presentes, visiblemente molestos por lo que consideran un abandono total por parte de las autoridades.
No es la primera vez que alzan la voz. El pasado 20 de agosto también tomaron la calle Juárez, pero denuncian que entonces fueron ignorados y maltratados, lo que los motivó a regresar con más fuerza.
Las imágenes de la protesta nocturna muestran a familias completas durmiendo en la calle, bajo lonas improvisadas y carteles que exigen justicia y apoyo. El ambiente es tenso, y la ciudadanía está dividida: unos apoyan la causa, otros lamentan el caos vial.