La reciente designación del nuevo dirigente del Comité Municipal del PAN ha generado fuertes críticas al interior y fuera del partido, al señalarse una clara intromisión de la gobernadora en un proceso que, aseguran, debió resolverse mediante un método democrático.
“Es muy triste que una institución política que en su momento le sirvió a México esté terminando de esta manera. El espíritu democrático del PAN murió hace muchos años, aunque ellos no lo han querido reconocer. Hoy lo que vemos es una muestra clara: ya no se trata de un método democrático, sino de una imposición que recuerda lo más rancio y criticado del viejo PRI”, señaló uno de los inconformes.
En este sentido, lamentaron que mientras el PAN formaliza imposiciones, Morena se encuentra trabajando en la conformación de comités de base. Asimismo, expresaron solidaridad con los cuatro aspirantes que habían levantado la mano, quienes fueron desechados de un día para otro sin derecho a participar, pues “todo se resolvió con la decisión de la gobernadora, al margen de la militancia”.
Finalmente, advirtieron que estas prácticas no solo debilitan a la institución, sino que también representan el preámbulo de una derrota electoral en 2027, recordando que los partidos se sostienen con prerrogativas financiadas con recursos públicos, lo que obliga a garantizar procesos internos transparentes y democráticos.