Por segundo día consecutivo, decenas de familias formaron largas filas afuera de las instalaciones de la Fiscalía General del Estado en Ciudad Juárez, Chihuahua. Todas comparten la misma angustia: saber si entre los 383 cuerpos hallados en el crematorio Plenitud, en la colonia Granjas Polo Gamboa, se encuentra el de su ser querido.
Desde el martes comenzaron a llegar personas en busca de explicaciones. El miércoles la afluencia creció. La preocupación es generalizada entre quienes solo quieren confirmar si las cenizas que recibieron tras un funeral realmente pertenecen a sus familiares. “Jugaron con nuestro dolor”, expresan entre lágrimas y rabia.
Los dolientes acuden con actas de defunción, fotografías, identificaciones y recibos de funerarias, tratando de aportar cualquier prueba que pueda ayudar en la identificación. En medio de la confusión, la esperanza de obtener respuestas se mezcla con la indignación y el duelo renovado.
Varios testimonios apuntan a funerarias como Luz Divina, Capilla Protecto Deco, Del Carmen, Ramírez, Latinoamérica y Amor Eterno, quienes contrataban los servicios del crematorio donde fue realizado el macabro hallazgo. Las autoridades aún no brindan certezas, mientras las familias enfrentan la dolorosa posibilidad de haber sido engañadas en uno de los momentos más frágiles de sus vidas.